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Como es que llegamos a que “Terminado es mejor que Perfecto” sea el título para nuestro primer post en el blog de Excite…

Hemos tardado meses en generar el primer post para nuestro blog. Si, desidia. Pero creo que obedecía a que estábamos buscando el tema perfecto, importante, coyuntural, divertido, diferente… Durante un tiempo preferimos tener una carpeta llena de bosquejos “perfectos”, que un post terminado y publicado en el blog.

He discutido ésta filosofía del “better done than perfect” con una diversidad de personas, muchos están a favor, algunos en contra pero de un lado o de otro, percibí que tendemos a radicalizar y hacer una interpretación muy estricta de lo que significa.  Pareciera que es una forma impulsar la mediocridad, cuando bien canalizado es la solución para ponerle acción a un pensamiento, de lograr un avance y con ello, crear un nuevo punto de partida para hacer algo mejor. En otras palabras, es una forma de mantenernos en constante movimiento, algo que nos facilita la innovación, la búsqueda de algo mejor “que se puede hacer” contra una idea perfecta “que no logramos poner en marcha”.

Lo anterior, nos lleva a la expectativa que tenemos de nuestro blog, que tiene el objetivo de –ayudar, informar o entretener- a un mayor número de personas y sus empresas; pero entendemos que vamos a empezar generando una serie de publicaciones imperfectas, que van a mejorar con el tiempo y, si tenemos suerte, con la retroalimentación de amigos, clientes y también del lector anónimo.

Sin embargo, más allá de que nos viene muy bien para arrancarnos con nuestro Blog, lo más importante es, hasta qué punto podemos aterrizar la frase “Terminado es mejor que Perfecto” en nuestros trabajos, negocios o empresas.

¿Esta filosofía es contraria a la búsqueda de la calidad total, six sigma, iso y demás?

Nosotros creemos que no. Una cosa es que un producto o servicio que ya salió al mercado se haga y se repita industrialmente sin errores, o según los estándares, con un mínimo de ellos; y otra es que el producto sea perfecto y por ello, no susceptible a ser mejorado.

Esto lo podemos ver muy fácil año con año en la industria automotriz, pero también en cualquier otra industria, desde la médica o farmacéutica donde pensaríamos que un producto no podría llegar al mercado si no fuera perfecto y no obstante, conocemos de fórmulas que se cambian y medicamentos que se retiran del mercado, hasta el servicio de telefonía, que dista mucho de ser perfecto y aun así ahora es difícil imaginar nuestro día, sin tener uno a la mano.

En una época en la que las condiciones del mercado y la competencia cambian tanto y son tan dinámicas, parece que puede ser conveniente hacer nuestra ésta filosofía, se puede convertir en una práctica que nos pone en el camino, pero no nos lleva a la meta final.

Hacer, terminar las cosas no nos garantizan el éxito para nuestra marca, empresa o producto, pero si nos pone un paso más cerca y en el mejor escenario, nos pondrá delante de nuestros perfectos competidores.

Bienvenido a nuestro Blog, esperamos que los temas que vayamos publicando sean de tu interés. Por favor, deja tus comentarios y dinos que piensas de éste tema.